El tesoro de Alfaz del Pi

Alfaz del Pi cuenta con varios tesoros de gran valor, desde las excavaciones romanas hasta museos y colecciones privadas. Museo Pedro Delso es uno de los tesoros bién quidados. La hermosa finca de 15 mil metros está repleta de arte del artista español Pedro Delso. Su esposa viuda, Signe, abre las puertas de su casa todos los sábados. Admire el arte, la cultura y sumérgete en el mundo de Don Quijote. 

Pedro Delso (1924-1994) fue pintor, ceramista y escultor. Estudió en la académia de arte de su ciudad natal de Soria. Luego estudió en Madrid, Barcelona, Roma y París. En sus primeros años colaboró ​​con Pablo Picasso. Mientras que el artista malagueño desarrolló el cubismo, Pedro Delso desarolló el triangulismo, un estilo inspirado en el surrealismo. A menudo lo utilizó en sus obras.

A principios de los años 70 conoció al amor de su vida. Signe tenía un empleo temporal como enfermera en Hacienda del Sol donde Pedro Delso presentó varias piezas de arte. Fué amor a primera vista, y su vida dió un giro con la rubia noruega de su alma. Signe, cuales planes eran regresar a su país, eligió el amor al cual cuidó al máximo los 20 años que estuvieron juntos. Ella dejó de trabajar y comenzó a construir la finca con su marido en 1978.

- Tu no tienes que trabajar. Puedes estar en casa conmigo, me dijo Pedro. En aquellos tiempos las mujeres cuidaban la casa y su marido. Eran otros tiempos, dice Signe Delso.

Estamos sentados en la mesa de la zona de barbacoa, una de ellas. Aquí protagoniza la paz y la tranquiladad rural, aunqué nos encontramos en pleno Alfaz. El lugar es una joya con sus vistas espectaculares a Benidorm y el Mediterráneo. La finca guarda el recuerdo de Pedro, en cada rincón hay recuerdos, el lugar ES Pedro Delso! Y no solo el jardin con sus eculturas, pero la casa también. Las paredes, hasta las puertas están adornadas con el arte de Pedro. En la planta alta está el taller de Pedro, donde muchas de sus obras vieron la luz. El estudio se mantiene como estaba cuando de pronto dejó este mundo. Las pinturas decoran las paredes y en las mesas del taller hay tacos de grabados. Las pinturas y grabados se venden a aquellos que deseen poseer una obra de arte de Pedro Delso.

Las estatuas y estatuillas adornan toda la finca, algunos de acero, otros de cerámica. En 1998, cuatro años después de la muerte de Pedro, la finca fué declarado Patrimonio Cultural de la Generalitat Valenciana. Esto significa que el lugar está protegido y considerado un museo.

Justamente afuera de la casa principal hay una casa de árbol.

- Fue la primera casa que construimos, dice Signe con una sonrisa. - No estoy de broma. Nuestra primera casa fué ésta. Sólo había sitio para un gran colchón. Aquí durmimos la siesta en muchas ocasiónes, recuerda Signe. - Algunos piensan que vivimos en la casa de arbol mientras construimos la casa, pero no fué así. Vivimos en Finestrat durante el período de construcción, dice Signe riendose y deja muertos los rumores falsos. 

Detrás de la casa principal, está la bodega. Es una gruta natural, cerrada con una puerta. Dentro está oscuro, y nuestros ojos poco a poco se acostumbra a la oscuridad y revela una larga mesa al final de la cueva, unas belas y botellas de vino. Un murciélago encuentra refugio en la oscuridad de la cueva. Aparte de un sitio ideal de almacenaje del vino, Signe guarda el recuerdo de todas las fiestas celebradas en la cueva mientras con Pedro como el gran amfitrión.  

- Quereis ver las sillas de los reyes, pregunta Signe. En la cima de la gruta Pedro hizo dos grandes sillas reales de obra. Desde aquí se puede disfrutar de vistas impresionantes de Benidorm, La Nucía y el Mediterráneo. Desde aquí se ve todo! 

Signe dice que Pedro era un enamorado de Don Quijote, algo que se refleja en sus obras. Tanto le gustó que construyó dos molinos blancos en el jardin. Están en la parte mas alta de la finca. El molino pequeño es un aseo decorado por Pedro Delso. Y como curiosidad están ambos Dulcinea y Pancho retradados en las paredes. Pacho haciendo sus necesidades, mientras Dulcinea le tienta con tetas al aire. El retrete mismo es también una obra de arte hecha en madera. 

Signe se sienta en el banco fuera del gran molino.

- ​​Pedro solía sentarse aquí durante las visitas de los muchos turistas que en su día nos visitaban. Puso una señora en cada pierna, por lo general las más mayores, y posaban para el fotógrafo, dice Signe antes de abrir la puerta roja al molino. El molino tiene tres plantas. La planta consiste en un salón con cocina americana y una gran chimenea. En la segunda planta hay un dormitorio con dos camas diseñados por Pedro, y la tercera planta es donde viven Don Quijote y Pancho con su burro. Son figuras en tamaño real, una curiosidad mas de ésta finca.  

          

Terminamos con una visita al taller, que está al lado de la entrada de la finca. Las paredes están repletas de obras de arte. La mesa de trabajo de Pedro está todavía intacta. Fue aquí donde hizo sus figuras y esculturas. El alma de Pedro Delsos está presente en todos los rincónes, tanto en el interior como en el exterior. El lugar ES Pedro Delso, y Signe sigue manteniendo viva el recuerdo de su marido abriendo las puertas al público ún día a la semana. Todos los sábados entre las 11.00 y las 13.00 se puede pasear entre esculturas y obras de arte, y conocer la vida y la obra del gran artista.